Ganaron los gobernadores, por así decirlo. Este día, el diario EXCÉLSIOR nos comparte en su portada la reconsideración de la Secretaría de Gobernación, para que las entidades federativas tomen el control del reinicio de actividades tras la cuarentena por la emergencia sanitaria; considerando por su puesto las indicaciones del semáforo nacional, pero sobre todo sus propias condiciones.
Por otro lado, y en un tema que también involucra a los mandatarios estatales, el diario LA RAZÓN DE MEXICO informa que para enfrentar los efectos que el COVID-19 ha dejado en los distintos estados, Tamaulipas y Jalisco tomaron la decisión de endeudarse con 4 mil 600 y 6 mil 200 millones de pesos. En el caso de Yucatán, van dos veces que el Congreso del Estado echa abajo la solicitud de endeudamiento por mil 728 millones. Guanajuato busca 5 mil, a pesar de que en enero ya se le aprobaron 5 mil 350 millones de pesos. En Coahuila, los diputados sólo aprobaron que el gobernador inicie renegociación de deuda con los bancos. Y en Colima, de plano no tienen posibilidades de contratar deuda. Todo esto en contra de las instrucciones del gobierno federal de prohibir adquirir estos créditos, que la mayoría son a 20 años, y bajo a la amenaza de movilizaciones sociales por parte de MORENA en los estados que decidan endeudarse.
Además, 7 estados solicitan al gobierno federal les sean reintegrados los recursos que han destinado para enfrentar la pandemia. Estas entidades son: Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Durango, Michoacán, Jalisco y Colima.